Christiana Figueres Olsen, postulada por Costa Rica a la Secretaría General de la ONU, descarta vincularse en un futuro a la actividad política del país. Pero pugna por construír más “puentes de diálogo y de colaboración” en medio de las diferencias.

Así lo afirmó  desde Bonn, Alemania, donde reside, en una conversación, vía Skype, con el periodista Edgar Fonseca, editor del sitio www.PuroPeriodismo.com, como parte de una entrevista para la revista Forbes-Centroamérica.

“La verdad es que sí lo descarto, porque diay Edgar, yo ya ahora este domingo (7 de agosto) cumplí 60 años, ya me he desempeñado a nivel global y me parece que ahí es donde he podido contribuir, y siempre estoy muy agradecida que hay otros que están contribuyendo a nivel nacional, y a quienes les agradezco, los respeto y los admiro”, respondió cuando le consulté si descartaba intervenir en la política local.

De momento, sostuvo, está concentrada en la campaña de su candidatura a la Secretaría General de la Organización de Naciones Unidas, a la cual fue postulada el 7 de julio por el gobierno del Presidente Luis Guillermo Solís.

Su postulación se dio tras coronar, con reconocimiento mundial a su tenaz gestión diplomática, un acuerdo global climático en una cumbre celebrada y respaldada por 195 naciones en París.

Figueres Olsen, ve  su aspiración a la ONU como “bastante difícil”, sobre todo por lo tardío del lanzamiento de la candidatura donde compite con otros 11 postulantes, seis hombres y otras cinco mujeres.

El portugués Antonio Guterres, ex Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Refugiados, figura como favorito a ser electo, tras una primera votación secreta en el decisivo Consejo de Seguridad de la ONU.

El candidato de consenso será propuesto a la Asamblea General de ONU en octubre.

¿Y piensa en el país?

De esa visión global, y de la apretadísima agenda suya y en sus relaciones internacionales diplomáticas, ¿le queda tiempo para pensar en Costa Rica?

-Sí, por supuesto, y cada día, uno de verdad da las gracias de haber nacido en un país tan bendecido, y por supuesto que los que viven en Costa Rica, yo en este momento no vivo allá, los que viven en Costa Rica pues viven todos los problemas diarios que tiene y quizá no se dan cuenta de que viven en un país bendecido, pero hay que viajar a otros países. No hay que tener mucha imaginación. Imagínese lo que es nacer hoy o haber nacido en un país como Siria. Imagínese lo que es nacer hoy o haber nacido en cualquiera de los países africanos donde ya no hay agua, ya no hay comida, donde están en un estado de desertificación, y la falta de comida y de agua. La verdad es que nosotros somos bendecidos por la naturaleza. Somos bendecidos por la historia nuestra. Somos bendecidos por nuestra democracia, por nuestra estabilidad, por nuestra neutralidad, por la falta de ejercito, por nuestra inversión en todos nuestros recursos naturales. Tenemos un país la verdad muy especial. Por supuesto, con nuestros altos y bajos, y no seríamos ticos si no tuviéramos diferencias de opinión sobre muchos temas, pero es un país muy bendecid. Yo agradezco muchísimo el haber nacido ahí.

Y con toda esa trayectoria suya, si se le postulara en algún momento a conducir el país, ¿usted lo aceptaría?

-La verdad nunca lo he contemplado porque creo que ahí tenemos cada uno de los miembros de la familia ha gravitado después del gran regalo de liderazgo y de responsabilidad que nos dieron nuestros padres, cada uno de los hijos de ellos ha gravitado a su nivel, a su área de trabajo, y yo gravité muy rápidamente al nivel global. Siento que es ahí donde yo tengo un cierto valor agregado. Me parece que sinceramente soy demasiado inútil como para participar en los temas nacionales.

-Pero, ¿no la descarta?

-La verdad es que sí lo descarto, porque, diay Edgar, yo ya ahora este domingo (7 de agosto) cumplí 60 años, ya me he desempeñado a nivel global y me parece que ahí es donde he podido contribuir, y siempre estoy muy agradecida que hay otros que están contribuyendo a nivel nacional, y a quienes les agradezco, los respeto y los admiro.

-¿Cómo ve las nuevas aspiraciones de su hermano, José María?

-Es algo que hay que preguntarle a José María, así como ese es un tema muy personal de él. Yo a él y a todos los demás que aspiran y que están dispuestos a entregar su vida, es que hay que darse cuenta que en esto de estar trabajando sea por un país o sea por el planeta, aquí todos estamos dispuestos y ya hemos sacrificado muchísimo en nuestra vida personal y yo le agradezco tanto a José María, como a todos los demás que están dispuestos a hacer eso, porque, bueno, es necesario por la patria, y no todo el mundo estaría dispuesto a hacer ese sacrificio. Así es que yo se lo agradezco a él y a todos los demás.

¿Su mensaje final?

-Mi mensaje final es que hay que apreciar a la gran patria que tenemos. Un país pequeño pero de un gran simbolismo universal, de una gran trayectoria universal, y que si bien es cierto que tenemos diferencias, pues mi invitación es que respetemos esas diferencias pero que pongamos más esfuerzo en construir puentes de diálogo, de colaboración”.