Es una marca que se jacta de tener “hoteles y resorts de lujo que crean experiencias de viaje inolvidables en los principales destinos del mundo”.

Presidentes, primeros ministros y miembros de la realeza se han hospedado en la exclusiva cadena de hoteles Ritz-Carlton, un hogar lejos del hogar para los adinerados.

Pero, de acuerdo a reportes de medios, el de Riad, la capital saudita, se ha convertido en una jaula dorada, dice un informe especial de BBC Mundo.

Menos de seis meses después de que el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, visitara el Ritz-Carlton en su primer viaje oficial a Arabia Saudita, quienes habitan sus lujosas instalaciones ahora son prominentes figuras sauditas que están allí bajo arresto, añade.

Es por ello –dice– que el hotel está siendo señalado como “la prisión más lujosa del mundo”.

 En lo que en el país describen como una purga anticorrupción en el reino conservador, fueron detenidos 11 príncipes, cuatro ministros y docenas de exministros, agrega el informe.

Informe especia:  BBC Mundo