Edgar Fonseca, editor/Mapa rutas Clan del Golfo, expediente judicial EE.UU., Univisión
El “Clan del Golfo”, dedicado al tráfico internacional de cocaína, designado como grupo terrorista por EE.UU., y con cuyas operaciones autoridades de dicha nación vinculan al exmagistrado Celso Gamboa Sánchez, es la organización ilegal con mayor poder criminal en Colombia, destaca un informe del sitio El Tiempo de Bogotá.
Son los ‘amos’ de rentas ilegales como la minería ilegal y el narcotráfico, ratifica dicho reporte. También los relacionan con el tráfico de migrantes por la región.
Su portafolio criminal también está compuesto por la minería ilegal de oro, la extorsión, el lavado de activos y el paso migratorio por el Darién, cita un informe de la Fundación Ideas para la Paz de Bogotá.
Usa la corrupción, pero además ha fortalecido la cooptación de liderazgos sociales, llegando inclusive a crear organizaciones y fundaciones en sus áreas de incidencia, añaden.
El Clan del Golfo fue declarado grupo terrorista por el Departamento de Estado el 20 de febrero 2025.
Tal designación incluyó a Tren de Aragua, Mara Salvatrucha (MS-13), cártel de Sinaloa, cártel de Jalisco “nueva generación”, cártel del Noreste (antes los Zetas), la Nueva Familia Michoacana, cártel de Golfo y “Cárteles Unidos”, según anuncio hecho por el secretario de Estado, Marco Rubio.
El 21 de agosto, La Nación reveló extractos de la acusación formal emitida por un gran jurado federal del Distrito Este de Texas, en Estados Unidos, el 9 de julio anterior, contra el exmagistrado y exministro de Seguridad, detenido desde el 23 de junio ante gestión urgente de la embajada de EE.UU. para trámite de extradición.
El medio mencionó una declaración jurada de un agente especial de la Oficina Federal de Investigación (FBI, por sus siglas en inglés) en Dallas, Texas, quien, “con conocimiento de primera mano” y quien menciona el supuesto vínculo de Gamboa con el Clan del Golfo.
El agente relató que, según su conocimiento, Gamboa lideraba una organización dedicada al tráfico de drogas, que tenía vínculos con el Clan del Golfo, en Colombia; y el Cartel de Sinaloa, en México, cita La Nación.
Gamboa habría sido el encargado de coordinar la recepción de la droga en Costa Rica, procedente de “miembros del Clan del Golfo y otros traficantes que viven en Panamá y Colombia”, agrega el medio local.
Antes de su arresto, Gamboa era un importante narcotraficante en Costa Rica. Gamboa había facilitado el envío de cocaína por valor de decenas de millones de dólares desde Colombia, a través de Costa Rica, a Estados Unidos y Europa, destacó un reporte de la Oficina de Control de Activos Extranjeros (OFAC) del Departamento del Tesoro de EE.UU., divulgado el 18 de agosto
Como exviceministro de Seguridad Pública de Costa Rica, Gamboa utilizó su extensa red de contactos dentro del gobierno para obtener información sobre las investigaciones antinarcóticos en curso. Posteriormente, vendió esta información a los objetivos de esas mismas investigaciones. Gamboa colaboró con narcotraficantes en Costa Rica, sobornando a policías y funcionarios gubernamentales para facilitar el transporte de cocaína. Trabajó con numerosos narcotraficantes en Costa Rica, incluyendo a Bell, designado por la OFAC, Alejandro Antonio James Wilson (James), Alejandro Arias Monge (Arias) y el ahora encarcelado López, aseguran las autoridades norteamericanas.
El exmagistrado niega los cargos en su contra.
El Tribunal Penal de San José dispuso el viernes extender por tiempo indefinido la prisión preventiva de Gamboa y otros dos extraditables de apellidos López y Álvarez hasta tanto acabe el trámite en sus casos.
Organización ilegal con mayor poder criminal en Colombia
El ‘clan del Golfo’, con más de 7.000 hombres según Inteligencia —o 9.000 de acuerdo con otros observatorios del conflicto—, es hoy la organización ilegal con mayor poder criminal en el país. Uno de sus principales fortines es Antioquia, donde son los ‘amos’ de rentas ilegales como la minería ilegal y el narcotráfico, destaca un informe del sitio El Tiempo de Bogotá del 22 de agosto.
Según la Fundación Ideas para la Paz, entre 2018 y 2025 este grupo creció en un 165 % en el número de sus integrantes. Ese poder de expansión, señala la organización, responde a la “combinación de una estructura típica de crimen organizado y de un ejército irregular”, se lee en el informe.
Se estima que una tercera parte de sus hombres está en armas, uniformados y con entrenamiento en combate y operaciones ofensivas, mientras que el resto se distribuye en “puntos”, “redes de apoyo” o “componente criminal focalizado”.
De acuerdo con los investigadores de la ONG, este esquema mixto fortaleció su capacidad de expansión en los últimos años, al punto de lograr gobernanza e incidencia criminal en 300 municipios del país.
Estas son las características del grupo armado que el Presidente catalogó como organización terrorista tras la más reciente escalada violenta, y que, al menos hasta ahora, sigue llegando a una mesa de negociaciones con el Gobierno en Catar.
“El Clan llega a este nuevo acercamiento con una correlación de fuerzas a su favor. El grupo está muy fortalecido militarmente y en proceso de expansión. Entre 2018 y 2025 sus integrantes aumentaron en un 165 %. Es decir, ni el gobierno Duque ni el gobierno Petro han podido contener su crecimiento”, aseguró Gerson Arias, investigador de la FIP.
En la actualidad, el Clan del Golfo es un grupo de crimen organizado que tiene, además de una sólida red de informantes, un componente armado que actúa en el marco del DIH. Mantiene un rol determinante frente al funcionamiento de los diferentes eslabones de la producción y tráfico de cocaína, tanto a nivel nacional como internacional. Su portafolio criminal también está compuesto por la minería ilegal de oro, la extorsión, el lavado de activos y el paso migratorio por el Darién, como advirtió la FIP en el informe La frontera del Clan: migración irregular y crimen organizado en Colombia, cita un informe de la Fundación Ideas Para la Paz de Bogotá, al que tuvo acceso PuroPeriodismo.
Hoy el EGC tiene una alta capacidad de reclutamiento. En sus filas hay exintegrantes de las FARC, del ELN y soldados y suboficiales retirados del Ejército. Usa la corrupción, pero además ha fortalecido la cooptación de liderazgos sociales, llegando inclusive a crear organizaciones y fundaciones en sus áreas de incidencia. Sin duda, es el grupo que más retos genera para la seguridad del país, advierte dicha fundación.
Según dicha fuente, el gobierno de Colombia reconoce como miembros representantes del grupo a Jobanis de Jesús Ávila Villadiego (“Chiquito Malo” o “Javier”), Orozman Orlando Osten Blanco (“Rodrigo” o “Flechas”), José Gonzalo Sánchez (“Gonzalito” o “Willinton”), Elkin Casarrubia Posada (“Joaquín” o “El Cura”), José Miguel Demoya Hernández (“Julián” o “Chirimoya”) y Luis Armando Pérez Castañeda (“Jerónimo” o “Bruno”).
Acelerada extradición a EE.UU. del jefe del cartel
La acelerada extradición a Estados Unidos, en mayo 2022, del jefe del cartel del narcotráfico más poderoso de Colombia, Dairo Antonio Úsuga David, alias ‘Otoniel‘, podría haber obedecido al afán del gobierno colombiano de impedir que continuara declarando ante la justicia, dijo a Univision Investiga el nuevo abogado de Otoniel, Alexei M. Schacht.
“No estoy seguro de la razón, pero sospecho que el gobierno de Colombia quería librarse de él porque estaba hablando con la JEP (Jurisdicción Especial para la Paz)’’, afirmó Schacht. “Ellos tienen miedo de lo que sabe’’, agregó, según dicha cadena.
Schacht asumió el 23 de mayo la defensa de Úsuga en el proceso por narcotráfico que el jefe del Clan del Golfo afronta en la Corte del Este de Nueva York. Reemplazó al defensor Arturo Hernández de Miami.
Se declaró culpable en 2023
El narcotraficante colombiano Otoniel, exlíder del Clan del Golfo, se declaró culpable el 25 de enero 2023 de los cargos que pesan sobre él en Estados Unidos, según la cadena BBC.
Dairo Antonio Úsuga David (su nombre de pila), de 51 años, recibirá una condena de entre 20 años y cadena perpetua, informó el Departamento de Justicia estadounidense.
Como parte del acuerdo con la fiscalía, Otoniel también aceptó pagar US$216 millones por concepto de incautación.
El otrora capo de la banda criminal, que llegó a ser el narcotraficante más buscado de Colombia, leyó su declaración de culpabilidad ante la jueza del Tribunal Federal del Distrito Este de Nueva York.
Antes de su extradición, Úsuga implicó a ministros, gobernadores, congresistas y militares por sus vínculos ya sea con el paramilitarismo o con el narcotráfico en testimonios rendidos ante la JEP.
Descrito por la acusación en Estados Unidos como el jefe de “una de las más grande, más violentas y más poderosas organizaciones del narcotráfico y paramilitarismo en el mundo’’, el capo se había entregado a las autoridades colombianas el 3 octubre de 2021 en medio de una masiva operación militar al noroeste del departamento de Antioquia.
PuroPeriodismo/El Tiempo, Fundación Ideas Para la Paz, Bogotá, Univision, BBC, Miami