Triple femicidio en Argentina atribuido al narco/Las invitaron a una fiesta donde les pagarían $300 a cada una

18

PuroPeriodismo/Clarín, Buenos Aires

La suerte de Brenda del Castillo (20), Morena Verdi (20) y Lara Gutiérrez (15) estaba echada. Las personas que responden al joven líder narco “Pequeño J” tenían todo organizado para matarlas, pero un descuido los delató y dejó al descubierto la trama de un triple crimen que se ejecutó para dejar un mensaje siniestro.

Las chicas fueron invitadas el viernes por la noche a una casa en Villa Vatteone, en Florencio Varela, donde les dijeron que le pagarían 300 dólares a cada una por asistir a una “fiesta”. Un anzuelo irresistible. Lo que ellas no sabían es que era todo mentira.

Las dos jóvenes de 20 años eran primas y, según versiones que ahora sus familias no avalan, trabajadoras sexuales en Flores. Allí conocieron a Lara, quien siempre seguía los consejos de su hermana Agostina, la que figura en una foto viral en las redes sociales ostentando dólares. La invitación fue para la adolescente, pero sumó a sus amigas.

Habían arreglado que les enviarían un auto de aplicación, pero a último momento les dijeron que las pasarían a buscar por la esquina de La Quila y El Tiburón, en Ciudad Evita, La Matanza, con una camioneta Chevrolet Tracker blanca.

Para los investigadores, este es uno de los detalles que la banda pensó para no dejar pruebas de dónde llevarían a las chicas. En caso de realizar un viaje con un auto de aplicación, la dirección del destino quedaría registrada y el conductor hubiese sido una de las últimas personas en verlas.

Además, la chapa patente de la camioneta era falsa. Un dato también que se hizo con el propósito de despistar a los investigadores.

A las 21.30 del viernes 19, una cámara del Centro de Monitoreo de La Matanza captó el momento en que las chicas subieron a la camioneta de manera voluntaria. Se dirigieron por la avenida Crovara hasta General Paz.

Según el impacto de los teléfonos celulares de las mujeres, la Tracker estuvo por los barrios de Flores y Floresta. También, por Lomas de Zamora y, finalmente, Florencio Varela.

Si bien una de las antenas dio que circularon por la autopista Buenos Aires-La Plata, no se logró identificar al vehículo en las cámaras de las cabinas de peajes, explicó a Clarín un investigador.

La casa, el escenario de una masacre

La casa de la calle ubicada en el cruce de las calles Río Jáchal y Chañar, del barrio Mayol de Florencio Varela, fue el escenario del macabro crimen que comenzó a pergeñarse 24 horas antes, cuando los narcos obligaron a sus dueños a acondicionarla para el hecho.

“Es una casa usada para venta de drogas, no un búnker. La pareja que vivía allí hacía la logística para los vendedores del narcomenudeo de esta banda en la zona sur”, explicó a este medio un investigador.

PuroPeriodismo/Clarín, Buenos Aires

Deja un comentario