En Tulum, exótica Riviera Maya de México tuvo el capo colombiano Pablo Escobar su última megamansión, detalla un informe de la revista Semana de Bogotá.
Escobar –dice Semana– “se fijó en parajes apartados como los alrededores de Tulum, la vieja ciudad amurallada de los mayas, que permanecían como un paraíso casi secreto entre el Golfo de México y la costa Caribe antes de experimentar su actual auge turístico”.
“Con sus 20.000 metros cuadrados de extensión, el hotel boutique Casa Malca no solo es el complejo más grande de la zona, sino el más opulento. De los días en que el delincuente más sanguinario de Colombia veraneó allí, acaso en compañía de su familia o de un séquito de bellezas y secuaces, queda muy poco: pasadizos bajo tierra y muros antibala son el pálido vestigio de esa época siniestra”, añade el informe.