Tribunal que sentenció a exDefensora calificó como “prueba esencial” llamada que le hizo a una testigo

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Edgar Fonseca, editor

El tribunal penal que sentenció a la exDefensora de los Habitantes, Ofelia Tailtelbaum, a nueve años de prisión por 32 delitos de uso de documento falso, calificó como una “prueba esencial” una llamada telefónica que, según autoridades judiciales, le hizo la exfuncionaria a una testigo clave en el juicio que se le siguió.

Así consta en el voto N 601-2019 del 29 de agosto anterior del Tribunal Penal II Segundo Circuito Judicial de San José que sentenció a la exDefensora, exviceministra de Vivienda y ex diputada PLN,  por alegadas anomalías tributarias con tres empresas ligadas a ella y le fijó impedimento de salida del país mientras la resolución queda firme.

La exDefensora sostiene inocencia en el caso y su abogado defensor, Fabio Oconitrillo, anunció que apelarán la decisión.

El tribunal que la juzgó lo integran los jueces: Erika Calvo Navas, Jorge Tabash Forbes y Sergio Quesada Carranza.

La llamada valorada por dicho  tribunal fue hecha a la costurera María de Los Ángeles Otárola Soto, vecina de San Carlos, quien declaró como

testigo en el juicio. Dicha llamada, según cita la sentencia, fue hecha el 3 de julio de 2014 a las 15:45 p.m. con una duración de 19:12 minutos.

Otárola Soto fue quien denunció inicialmente al OIJ, que en Hacienda aparecían supuestas declaraciones de renta de tres empresas a las que presuntamente ella daba asesorías y con las que, dijo, nunca tuvo relación.

Las empresas fueron vinculadas por las autoridades a la exDefensora y a parientes suyos, según la resolución del tribunal.

“Nunca trabajé para doña Ofelia, ni para ninguno de los socios que presentaron las declaraciones de renta. No sé como ellos obtuvieron mis datos para hacer estas declaraciones”, dijo Otárola en su testimonio ante los jueces, consigna la sentencia.

En los hechos probados, el tribunal consigna: “la acusada Masha Ofelia Taitelbaum Yoselewich, como representante y miembro de la Junta Directiva de las empresas antes descritas, ideó un plan delictivo para beneficiarse patrimonialmente a través de sus empresas mediante el pago inferior de tributos, lo cual logró al incluir datos falsos en declaraciones ante la Dirección General de Tributación del Ministerio de Hacienda. Para ello además usurpó la identidad de la ofendida María de los Ángeles Otárola Soto”.

“La imputada Masha Taitelbaum Yoselewich estructuró un complejo plan revestido de legalidad, valiéndose del engaño, con el conocimiento y la voluntad manifiesta de reducir la base imponible sobre la cual se calculan los tributos”, cita la resolución.

“En este caso –agrega la sentencia– se acreditó que se rindieron declaraciones tributarias engañosas, en el tanto reflejaron gastos inexistentes y con ello, se aportaron  datos y cifras a la Administración Tributaria que no se ajustaban a la realidad económica de las empresas Edificio Adrofer S.A., Inversiones Beyof  S.A. y Consultores ORS S.A., lo que verificó de manera sucesiva desde el periodo fiscal 2009 al periodo fiscal 2013”.

“Se acreditó también de  manera indubitable –según los jueces– que la imputada Masha Taitelbaum Yoselewich, teniendo en su poder los formularios oficiales  y las declaraciones de la  Dirección General de la Tributación, los cuales habían sido alterados y con pleno conocimiento de estas alteraciones,  las presentó por sí o por interpósita persona ante la Administración Tributaria. En esto consistió la actuación dolosa que desplegó la encartada  Masha Taitelbaum”.

Por este escándalo Tailtelbaum renunció a su cargo recién reelecta a la Defensoría en 2014.

Me pintaron como un monstruo

En una breve declaración ante el tribunal al final del debate, la exDefensora denunció que tanto la Fiscalía como la Procuraduría la “pintaron como un monstruo” en dicho caso.

“Quiero decirles que, que dicha que ven al ser humano frente a ustedes, luego de escuchar el viernes, tanto a la Fiscalía como a la Procuraduría pintaron un monstruo, persona sin sentimientos y esa no soy yo, yo durante toda mi vida solo he querido hacer las cosas bien”, afirmó.

“Cuando asumí por la muerte de mis padres, tuve que velar por las cosas que ellos me habían dado, soy bióloga y ecóloga, de asuntos contables no conozco absolutamente nada, durante muchos años he depositado mi confianza en gente experta, Juan Martínez, luego en Ileana Vargas, uno que no entiende de esto tiene que confiar en personas que le ayudan a hacer las cosas”, aseguró.

“Confié en ellos, sigo pensando que hicieron lo mejor, lo único que yo recibía era un documento para firmar y al final el documento cancelado, nunca tuve más nada que ver con la contabilidad de las empresas”, sostuvo.

“Mi abogado el licenciado Oconitrillo dijo que tal vez pudo haber omisión de mi parte, pero no señor, aunque yo hubiera visto los documentos con lupa no hubiera visto, no hubiera sabido, no soy contadora, confié en personas, siempre a través de mi vida he tratado de hacer las cosas bien”, expresó.

La llamada una “prueba esencial”, según el tribunal

“Por ser una prueba esencial, el Tribunal procede a la transcripción literal de la llamada que se dio entre la imputada Masha taitelbaum y la

señora María Otárola”, menciona el voto de los jueces.

LLAMADA IMPUTADA-OFENDIDA: 3/7/2014, 15:45 horas. Nota de

voz #005 (duración: 19:12 minutos) (ofendida: María Otárola)

(Imputada: Masha –Ofelia- Taitelbaum):

María: “Alo?”

Ofelia: “Alo, me oís?”

María: “Ya ahora sí, le oigo”

Ofelia: “Bueno, mira María, obviamente esto se convirtió en un problemón verdad, un problemón terrible, terrible por una cosa que yo

no sé si vos te acordás, esto viene de historia antigua por supuesto verdad, eh, donde vos, en aquel entonces, hace como quince años es

que ni siquiera me acuerdo, vos misma me dijiste a mí “doña Ofe, tranquila úselo”, si usted en algún momento no lo quería más…

María: “Jajaja, jaja, jaja”, ay doña Ofelia no me diga eso por Dios”

Ofelia: “Que es lo que no te digo”

María: “Usted me está diciendo a mí, que yo hace quince años le dije a

usted…”

Ofelia: “Bueno no sé si son quince o son diez, no sé pero hace ya muchos años, usted y yo hablamos sobre esto, yo le dije María yo la voy a

poner, yo lo voy a pagar, y usted me dijo no hay ningún problema…

María: “Doña Ofelia, doña Ofelia”

Ofelia: “Sí”

María: “Perdóneme, perdóneme lo que le voy a decir…”

Ofelia: “Dígame”

María: “Porque yo siento que le voy a faltar el respeto”

Ofelia: “No, no, no, no”

María: “Pero usted y yo nunca tuvimos una conversación de más de dos frases”

Ofelia: “Y de dónde salió esto, yo no lo inventé mi amor”

María: “Mi chiquita de dónde salió, yo no tengo la más remota idea, pero usted y yo, de hola María y hola doña Ofelia, nunca pasamos”

Ofelia: “Bueno solamente que yo esté equivocada que no creo, pero bueno no importa, no me estás faltando al respeto, estamos aclarando

una situación, el asunto es que de esto hay que salir de una manera”

María: “mmmjuuu”

Ofelia: “Ok, en mi opinión es muy fácil María, no hay ningún problema, creo que podemos salir del entuerto…”

María: “Mmmjuuu”

Ofelia: “Desgraciadamente si lo hubiéramos hecho cuando hablamos en octubre o en setiembre que no me acuerdo …”María: “No, no señora

tampoco fue en octubre, fue antes del ocho de mayo, antitos del ocho de mayo”

Ofelia: “Ah bueno, entonces esta bien, que yo te dije, echémolo para atrás para que vos no tengás ningún problema, de todas maneras,

obviamente aquí hay que hacer un procedimiento, que es una desinscripción que solo la podés hacer vos”

María: “Si, si ya Ileana la Contadora suya me lo dijo”

Ofelia: “Pero la verdad María es que punto y aparte, punto y aparte, yo lo que le dije a la Periodista, es que vos y yo, desde hace ya mucho

tiempo no tenemos esta, este acuerdo para decir de alguna manera, y que yo te había dicho que te desincribieras, que vos no te

desincribiste, y que entonces yo seguí pagando porque aún ahora sigo pagado, verdad, una cosa que no tengo ni porque, mejor te estuviera

ayudando a vos, pero bueno, no importa, lo que, y si vos le hablás a la periodista, y le decís…”

María: “Lo mismo me acaba de decir Ileana”

Ofelia: “Ah, te lo dijo”

María: “Si ya habló conmigo”

Ofelia: “Vos podés llamar a la mujer?”

María: “Si yo la puedo llamar”

Ofelia: “Bueno, si vos la llamas, vos le podés decir sencillamente, miré mijita, tal vez usted no me entendió, yo en algún momento recibí de doña

Ofelia plata, ya no, hace más de un año que ya no…”

María: “Pero doña Ofelia como le voy a decir yo a ella que he recibido los salarios que usted reporta a Hacienda para que después la Caja me

cobré a mí lo que la Caja me está cobrando…”

Interferencia breve…

Ofelia: “Alo, María es que, me está oyendo sí?”

María: “Sí, medio la oigo, algo interfiere”

Ofelia: “Ok, ok”

María: “Es que el asunto es así Ofelia, entiéndame, si yo digo que los salarios que están reportados a Hacienda son míos, yo tengo que

pagarle a la Caja una cantidad de dinero”

Ofelia: “Yo te la cubro mi amor. Primeramente cuando uno es un freelance, uno no necesita estar asegurado, pero en todo caso, en

todo caso…”

María: “Qué es un freelance? De qué me habla?”

Ofelia: “Freelance es que sos una empleada, ehhh, no no, cómo se dice, espérate para decirte como se dice freelance, ehhh, vos sos tu

propio, ay no, no sé ni cómo decírtelo, vos sos ay Dios mío”

María: “Un empresario independiente?”

Ofelia: “Exactamente”

María: “Mmmujuuu, mmmujuuu”

Ofelia: “Vos sos una, una, ehhh, una profesional, o una trabajadora independiente, y si te van a decir que tenés que pagarle eso a la Caja,

vos ahí no tenés que preocupar porque yo te lo voy a cubrir”

María: “Usted sabe cuánto es?”

Ofelia: “No, no tengo idea”

María: “Juju, usted por qué cree, usted por qué, dígame una cosa, nusted tiene una remota idea de por qué estoy haciendo lo que estoy

haciendo?”

Ofelia: “Noooo, lo que pasa…”

María: “Hablamos en, en, en términos de siete cifras”

Ofelia: “Sí, y que me estás diciendo María?”

María: “Que yo no tengo la plata para pagar eso, es mucho dinero”

Ofelia: “Pero yo te dije que yo te puedo ayudar, o sea yo me encargo”

María: “Porqué cuando yo te llamé en mayo y te lo dije no me escuchaste…”

Ofelia: “Porque me dijiste otra cosa mi amor”

María: “No Ofelia, tengo un problema y tengo que pagarle a la Caja, o pago la Caja, o hago algo…”

Ofelia: “Vos sabes cuánto es el pago a la Caja?”

María: “No, yo mejor la dejo que usted vaya y pregunte, para que se dé cuenta que yo no hago lo que estoy haciendo por…”

Ofelia: “No tenés la menor idea?”

María: “Solo sé que son más de siete cifras”

Ofelia: “Sí, pero siete cifras mucho, siete cifras poco? Puede ser…”

María: “Mucho”

Ofelia: “Bueno vea, vea mi propuesta, usted necesita un seguro

verdad? Yo le voy a arreglar ese problema, yo me voy a hacer cargo de la deuda…”

María. “Aja”

Ofelia: “Ok, yo me encargo de ella, pero yo necesito que mientras tanto usted me ayude a mí, o sea aquí se trata nos ayudamos.

María: “Mmmjuuu, mmmjuu, yo le quito el perro de traba que usted tiene detrás suyo y usted me resuelve mi problema? Ofelia: “No, yo lo

único que necesito es que vos le digas a la periodista, mire yo desde hace un año no recibo un cinco de doña Ofelia”

María: “No, es que yo no puedo decir que hace más de un año, yo nunca he recibido nada de usted doña Ofelia”

Ofelia: “No, es que, es que si le decís nunca, no nos sirve porque después no te puedo cubrir yo, mientras que si vos me le decís que

hace más de un año no recibo nada de doña Ofelia, y la verdad es que no me decir, si cuando ella me dijo ya está, yo me comprometo con

usted, y si yo le digo que me comprometo, me comprometo…”

María: “Yo conozco su palabra”

Ofelia: “A arreglarle su situación en la Caja. Entonces yo voy a ir averiguar cuál es la deuda que hay, la cancelo, alo?”

María: “Ok, sí estoy escuchando”

Ofelia: “Ok, yo la cancelo y la dejo asegurada”

María: “Ok, está bien”

Ofelia: “Entonces necesito que usted le diga a la periodista eso y necesito que le diga a la periodista eso, porque si esa vieja sale hoy

en la noche con esta carajada a mí me complica la vida”

María: “Yo sé, yo entiendo”

Ofelia: “No, no, si veo, si veo que lo hiciste porque sabés, si”María: “Si claro, por supuesto, usted cree que yo soy tugurienta y estúpida”

Ofelia: “No mi amor, ni tuguriana ni estúpida, nunca las he visto a ustedes así y me extraña que me lo digas”

María: “Pues así me siento, porque cuando yo la llamé a usted en mayo y le dije que por favor, que me ayudara, usted me dijo: “te saco”,

me sentí como quien coge un pedazo de papel higiénico, limpie su suciedad y lo tira, así me hizo sentir usted”

Ofelia: “No mi amor, no me explicaste bien, yo le pregunté a la contadora, y la contadora me dijo una cosa, yo te respondí lo que la

contadora me dijo, pero no nos, o sea, no nos entendimos, porque si vos me hubieras dicho eso que me estás diciendo ahora, es otra cosa

completamente, verdad, entonces yo ahora te entiendo perfectamente”

María: “Yo creo que usted, deberíamos de sentarnos, para que usted vea la condición física en la que yo estoy y entienda el problema que yo”

Ofelia: “Qué es lo que tenés?”

María: “Ofelia, yo prácticamente ya no puedo caminar, yo no puedo trabajar, porque yo no tengo cartílagos en las piernas, se deshicieron

los cartílagos”

Ofelia: “Bueno mirá, vamos a ver, vamos a ver, el problema primero lo tenemos que arreglar”

María: “Sí”

Ofelia: “Yo lo voy a arreglar”

María: “Mmmujuu, mmmjuu”

Ofelia: “Yo lo voy a arreglar, una vez que usted lo arregle. Si usted llama a la periodista y le dice, mire que pena, pero es que figúrese que

seguro fue que usted me entendió mal, porque yo no le dije que nunca, yo lo que le dije es que hace más de un año”

María: “Mmmjuu”

Ofelia: “Con eso es suficiente”

María: “Ok”

Ofelia: “Con eso es suficiente hace más de un año, doña Ofelia, hace más de un año, un poquito menos, por ahí, ya ella no me paga nada,

eso es todo”

María: “Ok, esta bien”

Ofelia: “Y, y, y, si le tenés que agregar, yo metí la pata, porque le decís, porque no me desinscribí, yo mañana, mañana, estoy

averiguando en la Caja, cuál es la deuda que usted tiene, verdad”

María: “Aja”

Ofelia: “Ok, y la estoy cancelando”

María: “Ok”

Ofelia: “Yo necesito, que usted, antes de que esta vieja salga con esto hoy en la tarde, usted le aclare”

María: “Ok”

Ofelia: “Si usted le aclara, yo me voy a estar en frente de la Tele, yo voy a ver como usted le va a aclarar, verdad”

María: “Ok”

Ofelia: “Con decirle, miré, no, no, que horror, dígale así, como voy yo a querer yo perjudicar a doña Ofelia jamás, ah bueno, este, yo te voy a

arreglar esto, vos querés que nos sentemos y hablemos. Mirá, yo te dije que nosotros, la Defensoría, tenemos oficinas en San Carlos”

María: “Aja”

Ofelia: “Y yo voy a hacer una visita”

María: “Aja”

Ofelia: “A San Carlos en agosto”

María: “Aja, perfecto”

Ofelia: “Hoy qué estamos, en julio?”

María: “Aja”

Ofelia: “En agosto, no estoy segura si es el 21 y 22, ó el 28 y 29, eso es lo que no estoy segura”

María: “Ah yo me lo averiguo”

Ofelia: “Entonces, no, no, no, yo te voy a llamar antes, no tenés que averiguarlo, yo te voy a llamar antes porque yo te voy a ir a visitar”

María: “Ok, esta bien”

Ofelia: “Ok”

María: “Ok”

Ofelia: “Para ese entonces María, para ese entonces, nosotros tenemos que tener esto de sobra arreglado”

María: “Ok”

Ofelia: “Y yo te lo voy a arreglar, y te voy a dejar asegurada ”María:

“Ok”

Ofelia: “Ok?”

María: “Esta bien, ok”

Ofelia: “Lo que necesito es que en algún momento me des tu dirección exacta, verdad, no solo porque te voy a ir a visitar en agosto, sino

porque además, para que te lleguen, las, las cuestiones del seguro, para que te atiendan”

María: “Si, si, si entiendo”

Ofelia: “Si nosotros arreglamos esto, si nosotros arreglamos esto, yo después te ayudo también con una pensión de invalidez, pero por el

momento arreglemos esto”

María: “Ok, ya entendí”

Ofelia: “Que le vas a decir a la vieja, a ver?”

María: “Que hace más de un año que no recibo ni un cinco de usted”

Ofelia: “No, pero porqué la estás llamando?”

María: “Porque me equivoqué, porque me confundí”

Ofelia: “No, no, le vas a decir, le vas a decir, ay miré Marcela la llamo porque mire que me llamo doña Ofelia, a quien no oía hace años”

María: “mmmjuu”

Ofelia: “Y me dijo que usted, como que me malinterpretó lo que yo dije”

María: “Sí”

Ofelia: “Yo lo que le dije es que ya ella, desde hace como un año, ya ella no me paga nada”

María: “Sí esta bien”

Ofelia: “Y yo no me desinscribí”

María: “Ok”

Ofelia: “Y como yo no me desinscribí, pues ahí siguió apareciendo eso, y eso es todo”

María: “Ok”

Ofelia: “Entonces si todo eso sale, si eso sale bien, yo mañana mismo porque así es, yo entre mañana y el lunes, para no decirle ya, ya, ya”

María: “Yo sé que usted está muy ocupada”

Ofelia: “No, no, pero eso no se preocupe, entre mañana y el lunes, yo estoy averiguando cuando hay en deuda a la Caja, vos decís que hay

una deuda importante que debe estar a tu nombre y con tu cédula, la ponemos al día, y usted queda asegurada”

María: “Ok esta bien”

Ofelia: “El seguro se lo puedo pagar yo con mucho gusto aquí en San Jose”

María: “Ok”

Ofelia: “Lo que hay que ver es cómo le llega a usted la orden, la voy a asegurar como trabajadora independiente”

María: “Mmmjuu”

Ofelia: “Esta bien?”

María”“Esta bien”

Ofelia: “Ok”

María: “Ahí vamos resolviendo las cosas, las vamos resolviendo”

Ofelia: “Yo la verdad lo siento mucho María, vos sabes que yo no soy ni malcriada, ni de ofender a nadie, todo lo contrario verdad?”

María: “Mmmjuu”

Ofelia: “Si te sentiste mal no fue mi intención, porque jamás, de los nunca, sencillamente no te entendí, o sea no te entendí, o sea yo lo

que pensé es que te desinscribías y ya inmediatamente se te abría la posibilidad del seguro”

María: “Yo creí, yo creía lo mismo”

Ofelia: “No te entendí, no te entendí, que había una deuda de esta magnitud ahí”

María: “Diay ahora como todo esta digitalizado, todo aparece aunque uno lo quiera escapar”

Ofelia: “Bueno usted no se preocupe, es más me voy a meter a la computadora ahora mismo a ver si aparece”

María: “Ok”

Ofelia: “A ver si aparece, a ver si aparece esa deuda y ehhh, si salimos, le agradecería me llamara para decirme que ya la periodista esta se

tranquilizo”

María: “Ok, voy a, voy a…”

Ofelia: “Ella dijo, ella dijo que quería que yo le diera declaraciones, pero yo le dije miré déjeme averiguar, porque realmente estoy

confundida, entonces esta bien, yo te localicé, verdad, conversamos y la verdad es que diay si quedó como extraña la cosa. Si te pregunta

qué era lo que hacías de trabajo conmigo, entonces vos le decís que trabajos sencillos, trabajos de llevar papeles, de recoger papeles,

hacer mandados, ese tipo de cosas”

María: “Ok, esta bien”

Ofelia: “Nada más, bueno creo que hasta ahí estamos bien. Bueno y ahora en otro orden de cosas, a ver qué es lo que te pasa? porqué es

que no podes caminar?

María: “Porque no tengo cartílagos en las piernas, porque, porque se me desgastaron los cartílagos y tengo las rótulas deshechas”

Ofelia: “Y entonces cómo andás?”

María: “Arrastrando los pies como los viejitos de cien años, por eso casi no voy a San José y casi no salgo de aquí, y ni de la casa casi

salgo, y tengo un problema de tiroides por el que me sacaron un tumor que tengo que estar permanentemente con atención médica por el

problema de la tiroides y tengo unas pelotas en un pecho y el día de la mamografía perdí la cita porque no tenía seguro y tengo los brazos llenos

de pelotas que no se sabe qué son y todas esas cosas, y una y otra, y otra, y otra cosa, todas esas cosas a la edad mía acechan”

Ofelia: “Qué edad tenés?”

María: “Cincuenta y uno”

Ofelia: “Cincuenta y uno, juepucha. Hace cuánto estás vos en San

Carlos?

María: “En el año noventa y seis me vine yo para San Carlos.”

Ofelia: “Juepucha, bueno, mire, solucionemos esto y yo con mucho gusto le ayudo”

María: “Ok”

Ofelia: “Realmente yo no tengo ninguna intención más que ayudarle”

María: “Y yo no tengo ninguna intención de hacerle daño, ni de destruir su carrera política, ni de ninguna otra cosa, Ofelia yo lo único que

quiero es resolver mis problemas”

Ofelia: “Si, si, si, si, si, si, esta bien”

María: “Así que, ay lo siento mucho si la hizo pasar un mal rato la periodista pero no es mi culpa”

Ofelia: “No, no, no, no, no, no, no, no, no, ella díay yo le dije que teníamos tiempo de no hablar, que yo no sabía de qué se trababa esto

y le dije lo que vos le vas a decir que si, que efectivamente vos siempre estuviste ayudándome, después ya no más, y que hace más

de un año, hace aproximadamente un año le dije”

María: “Ok, aproximadamente un año”

Ofelia: “Si aproximadamente un año que ya no, que yo te dije que te desinscribieras, pero diay no lo hiciste, y eso pudo haber salido este

problema posterior y ya esta”

María: “Ok”

Ofelia: “Y yo voy a arreglar lo de la Caja, de por sí te lo voy a arreglar, hoy en la noche, es más, es más, voy le podés decir a ella mire,

ustedes saben lo importante que es la Defensora de los Habitantes, mejor no saque nada, mejor no saque nada, porque después la

fregamos a ella a la pura bulla, yo creo que con eso ella no va sacar

nada, ok”

María: “Ok, voy, voy a llamarla, voy a buscar el teléfono y la llamo”

Ofelia: “Yo lo tengo, si querés el número”

María: “No yo lo tengo, en alguna parte ahí, creo que en el bolso lo tengo tranquila”

Ofelia: “Sino, si no lo tenés me llamas y yo te lo doy”

María: “Ok”

Ofelia: “Bueno María, voy a dejarle y voy a meterme a la computadora a ver si sale eso”

María: “Ok, que tengás buena tarde”

Ofelia: “Sino mando a preguntar a la Caja, no te preocupes, esto lo voy

a arreglar”

María: “Ok, ok”

Ofelia: “Bueno chao”

María: “Ok”.

Sin duda se trata de la voz de la señora Tailtelbaum

Al hacer el análisis de dicha llamada, los jueces  consideraron que no había duda que se trataba de la voz de Tailtelbaum.

“Dicho lo anterior, de seguido analizaremos la grabación de la llamada telefónica que le realizó la imputada Masha Taitelbaum a la señora María Otárola, llamada que como se pudo apreciar, circuló en varios medios de comunicación. La conversación la reproducimos en el debate y para facilidad únicamente de redacción de esta sentencia, procedimos a transcribirla literalmente y la agregamos al sumario de prueba. Luego de reproducir dicha grabación, los suscritos juzgados han estimado que sin duda se trata de la voz de la señora Masha Taitelbaum, no solo porque se identifica como tal sino también porque es fácil identificar la voz, en todo caso, de las manifestaciones de la testigo y de la propia imputada, hay circunstancias indiciantes que permiten sostener sin lugar a dudas que la persona que habla es la señora Masha Taitelbaum, por el contexto y además al final da cuenta que con ocasión de su cargo como Defensora de los Habitantes -para entonces recién reelecta en dicho cargo- se tenía planeado un viaje a San Carlos y le dice a su interlocutora María Otárola que va coordinar con ella para visitarla cuando esté en San Carlos. Esta llamada es sumamente importante porque se revela como veraz la declaración de la señora María Otárola en virtud de las manifestaciones autoincriminatorias graves dadas por la imputada Masha Taitelbaum y se disipa cualquier resquicio de duda que podría tenerse sobre el conocimiento efectivo y directo que tenía la encartada Masha Taitelbaum en general sobre la maquinación artificiosa ideada para procurarse un lucro injusto al incluir datos falsos en los formularios tributarios, en cuanto se señaló que María Otárola le brindaba servicios profesionales a las empresas señaladas, en virtud de lo cual se le pagaron los honorarios, rubro que como vimos se tomaba como gastos de las empresas y por lo tanto, se alteraba la realidad con la finalidad evidente e indiscutible de rebajar la base imponible de los impuestos que debían pagarse. Ese conocimiento le resulta atribuible a la aquí imputada, que es en definitiva de lo que se trata el dolo.

Análisis de prueba y dolo

“Analizada la prueba en su conjunto y al confrontarla con las manifestaciones dadas en esa conversación telefónica que tuvo con la señora María Otárola, se refuerza la prueba que se tiene para demostrar el dolo con el que la imputada realizó los comportamientos, es decir, el conocimiento y la voluntad”, cita la sentencia.

“Corolario de lo anterior –agrega la resolución– la imputada Masha Taitelbaum Yoselewich, teniendo en su poder los formularios oficiales y las declaraciones de la Dirección General de la Tributación, los cuales habían sido alterados y teniendo pleno conocimiento de estas alteraciones, de manera dolosa las presentó por sí o por interpósita persona ante la Administración Tributaria”.

“Ha quedado firmemente expuesto como para el Tribunal no existe duda de que la imputada sí conocía de las adulteraciones, concretamente en cuanto al rubro por pago de servicios profesionales a favor de la señora María de los Ángeles Otárola Soto que las empresas indicadas reportaron al fisco, lo que fue parte de una maniobra orquestada, pues está persona nunca brindó estos servicios a las empresas, ni siquiera podía brindarlos, en tanto no era ni es una profesional”, añade la sentencia.

“De conformidad con el principio de correlación entre acusación y sentencia, el Tribunal ha tenido por demostrado que fueron treinta y dos documentos falsos los que utilizó y presentó la sentenciada ante la Administración Tributaria, a saber: Con relación al período 2009, el Tribunal tiene por demostrado que Taitelbaum y la fallecida Vargas, con la intención de inducir en error a la Administración Tributaria, y lograr beneficiarse mediante el pago inferior a las cargas tributarias”, consigna la resolución.