-Víctima: mayor general en retiro Roberto Samcam de 67 años
-Residía entre Los Ángeles y San José por temor a un ataque
Edgar Fonseca, editor/Confidencial, Nicaragua Investiga
El asesinato a balazos del exmilitar retirado nicaragüense, mayor general, Roberto Samcam Ruiz, de 67 años, perpetrado en un apartamento en Moravia, este jueves, desató profunda conmoción pública y el temor a que obedezca a una acción ejecutada por sicarios de la dictadura de Nicaragua en suelo tico.
El suceso ocurrió a las 7:30 a.m. en el segundo piso del condominio Naples, ubicado a un costado del centro comercial Lincoln Plaza en Moravia.
Samcam, quien residía en el país desde 2018, fue atacado por un individuo que logró llegar hasta el sitio, aprovechó que la puerta estaba abierta, llamó y al salir la víctima le disparó en al menos ocho ocasiones, confirmó el director del OIJ, Lic. Randall Zúñiga.
Sufrió heridas en el abdomen, una pierna, tórax y axilas.
El sicario llegó en un vehículo del cual descendió, ejecutó la acción y huyó en el mismo vehículo.
Ingresó al condominio sin dificultad ya que por la mañana no hay servicio particular de vigilancia, detalló Zúñiga.
A parecer se hizo pasar por mensajero que iba a entregar un paquete.
Incluso saludó a unos obreros en el sitio.
Subió unas escaleras y consumó la acción.
Se presume que la puerta del apartamento estaba abierta porque la víctima iba a salir.
Al momento del ataque una hija suya se encontraba en una habitación contigua y fue quien constató el hecho. Su esposa no estaba.
El jerarca OIJ, ligó este hecho al ataque perpetrado contra el también opositor nicaragüense Joao Maldonado, el 10 de enero 2024 , en San Pedro Montes de Oca, hecho atribuido por la víctima a sicarios del régimen sandinista.
Pese a graves heridas, Maldonado sobrevivió de milagro y meses después dejó el país con destino a EE.UU. ante amenazas en su contra.
La oposición nicaragüense y medios independientes que difunden desde el exilio en San José no dudaron en relacionar el atentado con una supuesta acción de agentes de la dictadura de Nicaragua que operarían en el país, dada la fragilidad de los sistemas de seguridad ticos.
La vulnerabilidad de los exiliados nicaragüenses en Costa Rica se ve exacerbada por las limitaciones de los servicios de inteligencia costarricenses para detectar y neutralizar células operativas extranjeras. La porosidad fronteriza, combinada con la facilidad de movimiento de sicarios especializados desde Nicaragua, crea un entorno propicio para este tipo de operaciones. El régimen Ortega-Murillo aprovecha estas condiciones para proyectar su capacidad represiva más allá de sus fronteras, enviando un mensaje disuasorio a toda la comunidad opositora en el exilio, destacó el sitio Nicaragua Investiga.
El asesinato ejecutado en el condominio de Moravia exhibe todas las características de una operación de inteligencia criminal sofisticada. Los sicarios emplearon el engaño clásico del falso delivery para acceder a la residencia, metodología frecuentemente utilizada en eliminaciones selectivas. La precisión de ocho disparos certeros y la fuga coordinada en motocicleta evidencian entrenamiento especializado y conocimiento previo de las rutinas de la víctima, sugiriendo vigilancia previa y recursos logísticos considerables, ratificó dicho medio.
Expresidenta Chinchilla condena y censura a la DIS
La expresidenta Laura Chinchilla condenó la acción, no dudó en acusar del hecho a sicarios de la dictadura de Nicaragua y arremetió contra la DIS.
La acusó de “descuido e indolencia” en la protección de nicaragüenses refugiados o asilados en el país.
“Es inadmisible que los sicarios de la dictadura de #Nicaragua operen con total libertad e impunidad en nuestro país”, censuró la exmandataria enfrentada a la administración Chaves Robles.
“Por Roberto, su esposa e hija quienes fueron testigos de la masacre que sufrió, y por los nicaragüenses que también han recibido amenazas, exijo que se investiguen los hechos y se ejecuten medidas inmediatas de protección a quienes lo requieren”, agregó Chinchilla.
El exmilitar residía intermitentemente entre Los Ángeles y San José, por temor a un ataque.
Vivía refugiado en el país tras la rebelión opositora de 2018 y era un férreo crítico de la dictadura en medios de comunicación independientes.
Regresó apenas el 16 de junio y evitó ir el lunes al funeral de la expresidenta de Nicaragua, Violeta Barrios de Chamorro, celebrado en el Templo Votivo del Sagrado corazón en barrio Francisco Peralta, San José.
Embajada de EE.UU. conmocionada
La embajada de EE.UU. en San José se manifestó conmocionada por el acontecimiento.
Conmocionados al enterarnos del homicidio hoy, en San José, de Roberto Samcam, oficial militar nicaragüense retirado y reconocido analista político que vivía en el exilio en Costa Rica, destacó la misión diplomática en un post X a las 3:49 p.m.
Ofrecimos a las autoridades costarricenses nuestro apoyo para llevar ante la justicia a los asesinos y a quienes están detrás de ellos, añadieron.
Objetivo político
Según el sitio Nicaragua Investiga, Samcam era un objetivo político para el régimen de Managua.
Samcam representaba una amenaza específica para el aparato de seguridad orteguista por su condición de militar retirado con credibilidad institucional entre las fuerzas armadas nicaragüenses. Su capacidad de influencia en sectores castrenses activos, combinada con su labor mediática denunciando la corrupción del régimen, lo convertía en un objetivo prioritario para neutralizar. El régimen percibe a los militares disidentes como vectores potenciales de desestabilización interna, particularmente aquellos con redes de contacto dentro de la institución armada, amplía en un análisis del caso dicho medio.
Fue asesinado a sangre fría, destacaron.
Era originario de Jinotepe, Carazo.
Aseguraba en sus entrevistas que opositores al régimen Ortega-Murillo eran asesinados mediante ejecuciones al “mejor estilo de la mafia en el poder”.
Acusan a la dictadura
Esta acción criminal de la dictadura de los Ortega-Murillo, confirma que el Estado de Nicaragua, está actuando mediante sicarios en Costa Rica, tal y como lo demuestran otros atentados ocurridos en el pasado reciente que ponen en evidencia el funcionamiento de células de espionaje y sicario del régimen orteguista en suelo costarricense”, dijo la opositora Unidad Nacional Azul y Blanco en un comunidad publicado tras la noticia.
El bloque opositor ha exigido al gobierno de Costa Rica una investigación exhaustiva y el castigo de los responsables de la represión transnacional.