Edgar Fonseca, editor/Foto E.Fonseca M.
El salto súbito de 21 contagios de coronavirus ayer lunes, el mayor en 46 días desde que se desató la alerta sanitaria, encendió alertas de preocupación entre las autoridades de Salud.
“Nadie quiere tener un país hincado por el covid-19”, advirtió el ministro de Salud, Daniel Salas, al dar conocer la nueva cifra total de contagios en 951.
“Hoy tenemos 21 casos nuevos. No obstante 15 de estos eran contacto de un positivo y tenían orden sanitaria de aislamiento vigente”, destacó.
“Ese ha sido uno de los éxitos del seguimiento que le ha dado Costa Rica a la evolución de la pandemia. Hemos logrado identificar los contactos cercanos en la mayoría de los casos”, amplió.
De los 21 nuevos casos, 12 son locales y 9 de extranjeros.
Un llamado de atención
“Los 21 casos que se reportan el día de hoy, per se, no significa que vamos a detener el plan de reactivación pero sí es un llamado de atención, sí es un llamado de atención”, respondió Salas a consultas de este editor.
“Si esta condición de aumento de casos se sostiene o incluso se incrementa y empezamos a ver muchos casos de personas que no tenían una orden sanitaria previa, que están surgiendo en diferentes partes del país, que ya tenemos un aumento importante en lo que es el internamiento, específicamente en cuidados intensivos en la Caja, pues, obviamente, no solamente nos podría hacer detener la agenda de reactivación sino incluso ir para atrás”, previno.
“Hay un nivel en donde nosotros podemos tomar medidas, en donde todavía la capacidad de moldear el futuro de lo que está sucediendo en Costa Rica con el Covid-19 lo tenemos”, dijo.
“Pero –afirmó– llega un momento en que podemos perder esa capacidad”,
“Hay una responsabilidad individual ineludible en la evolución positiva o negativa de esta emergencia”, puntualizó.
“No podemos relajarnos”, insistió Salas.
Fin de semana de relajo para muchos
El ministro de Seguridad, Michael Soto, censuró simultáneamente que este fue un fin de semana muy complejo para las autoridades que formularon centenares de partes por las infracciones a la restricciones sanitarias y por aglomeraciones restringidas en diferentes sitios privados, residencias, bares, casinos.
Las autoridades intervinieron en 104 casinos, bares y restaurantes sin tener autorización por la pandemia.
“Fue muy complicado para la Fuerza Pública”, dijo el ministro Soto.
Atendieron 2.067 llamadas por fiestas en fincas y casas de habiración.
Más de 1.700 de las alertas –dijo– tenían que ver con personas que denunciaban algún tipo de aglomeración.
En el río Gato, Pejibaye de Cartago, rescataron 15 personas arrastradas por una cabeza de agua. Una aglomeración improcedente en esta emergencia, puntualizó.
Informó, además, del decomiso de 37 bicicletas por circulación en vías restringidas.
Llamó a los ciclistas a evitar aglomeraciones.
“Otra vez tuvimos reportes de una cantidad importante de personas irrespetando el distanciamiento. Esto se trata de vidas, no de un juego”, enfatizó el titular de Seguridad.
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951 contagios, 628 recuperados
Según el reporte oficial de este lunes:
-de los casos confirmados 444 son mujeres y 507 hombres
-778 costarricenses y 173 extranjeros
-casos positivos en 70 cantones
-628 personas recuperadas en 61 cantones
-10 fallecimientos, una mujer y nueve hombres, con un rango de edad de 45 a 87 años.
-15 personas se encuentran hospitalizadas, dos en cuidados intensivos una de 55 y otra de 64 años.
Tenemos que reaccionar
Ante las cifras de este lunes, el ministro Salas demandó que el país reaccione “en muchas de las formas en que tenemos que comportarnos como sociedad en medio de una pandemia”.
“Una persona que se salió de su burbuja social y fue a visitar a sus sobrinos fuera de la Gran Área Metropolitana, sin saber que estaba infectada, al final contagio a sus dos sobrinos”, lamentó.
“No podemos llegar y provocar brotes y focos de infección”, insistió el jerarca de Salud.
“Si lo empezamos a hacer de manera generalizada, nos puede complicar mucho el panorama”, aseveró.
Salas ratificó que desde el Ministerio de Salud se analiza con detalle cada caso y su conjunto con el fin de tomar las decisiones epidemiológicas más indicadas.
“Desde nuestro equipo de vigilancia lo que se busca es desgranar el dato, haciendo un análisis cualitativo de la cifra diaria que nos permita dimensionar riesgos de contagio”, dijo.
Las fechas de aperturas graduales de actividades –según el funcionario– no están garantizadas, reiterando que el cronograma propuesto depende de la evolución de los contagios y dicha evolución depende directamente del comportamiento ciudadano.