Edgar Fonseca, editor/Foto Instagram Lorena Velásquez chef
Un grupo de escaladores costarricenses alcanzó el denominado “Campo Base” del Everest desde donde el montañista Warner Rojas intentará conquistar por segunda ocasión la mayor cúspide mundial.
La chef Lorena Velásquez compartió en Instagram imágenes y las vivencias de los compatriotas que acompañan a Rojas.
El Campo Base, que sirve de punto final de despegue de las expediciones al Everest, tiene una altura de 5.346 metros.
“De pronto a lo lejos comienzan a aparecer las tiendas de Campo Base. Sensación? Sin palabras. Seguimos… llegamos…uf, q momento mágico, inexplicable. Nos recibieron con té y café caliente, nosotros nos abrazábamos con regocijo y satisfacción. Momento único que quedará plasmado de por vida en alma y corazón”, narró Velásquez.
El escalador Rojas continuará solo el ascenso junto a un sherpa nepalí y espera alcanzar su segunda llegada en las dos primeras semanas de mayo.
Su primer escalamiento se dio el 25 de mayo 2012.
Este año va con doble desafío, además de subir al Everest, 8.848 metros de altura, pretende de inmediato conquistar el Lohtse, 8.516 metros, la cuarta montaña más alta del mundo.
Rojas concedió amplia entrevista a este editor el pasado 17 de marzo tras arribar a Katmandú, Nepal. Ver PuroPeriodismo You Tube
Momento mágico, inexplicable
Adjunto texto de la chef Velásquez
“Así comienza esta historia.
“Bañados en nieve del día anterior, nos despertamos de madrugada porque hoy era el gran día. La mañana nos esperaba con ansias, el cielo y la tierra cubiertos con un manto blanco de la nevada de la noche anterior.
“Mi habitación pululaba de emoción y ansiedad y obvio q mucho frío, nada le ganaba a lo que íbamos a vivir hoy, llegar a la base de la imperante montaña más alta del mundo, donde cientos de intrépidos escaladores hacen el intento de llegar a la cima año con año.
“Este año muy especial para nosotros al tener el privilegio de acompañar a nuestro querido amigo Warner Rojas, el único tico q ha logrado tal hazaña y que lo intentará por segunda vez.
“Comienza nuestra caminata entre cielos nublados y mientras vamos avanzando los rayos de sol comenzaban a saludarnos. Ni les describo el camino, verdaderamente indescriptible su belleza.
“De pronto a lo lejos comienzan a aparecer las tiendas de Campo Base. Sensación? Sin palabras. Seguimos… llegamos…uf, q momento mágico, inexplicable. Nos recibieron con té y café caliente, nosotros nos abrazábamos con regocijo y satisfacción. Momento único que quedará plasmado de por vida en alma y corazón.
“Sentir la complicidad de las montañas y el cielo que nos dieron su mejor versión al despejarse completamente cuando llegamos. Se me salen las lagrimas de la felicidad aún.
“4 horas y media de Gorakshepe hasta campo base y de regreso y sí, a pesar del frío y la dificultad, mi sonrisa nunca se borró de mi semblante.
“Luego bajar de Campo base y a seguir el descenso, nos esperaban casi 9k más bajando para llegar a nuestro siguiente albergue.
“Un descenso difícil, después de 10 horas de caminar, con tormenta de nieve, pero a través de un lugar místico, un santuario o lugar sagrado dedicado a todas esas personas que han fallecido intentando llegar a la cima de la montaña más alta del mundo.
“Si se me eriza la piel. Llegamos a nuestro albergue. Nieve que caía por doquier, con frío hasta en las entrañas pero con satisfacción, nos acurrucamos a la par de la estufa para calentarnos, sin comunicación porque el Internet se cayó por la tormenta, cenamos y a dormir”.