Edgar Fonseca, editor/Foto LDA CR
Alajuelense se quitó anoche un gran peso de encima, fulminó a la S, 1-0, en la agonía de un cerrado choque, y apuntó a la ansiada copa 31 en la serie finalísima contra Herediano.
La iluminación falló abruptamente en el Morera Soto tras el gol de cabezazo de Bran a pase de Campbell al 91´de descuento.
El partido fue suspendido por el árbitro Calderón tras el súbito fallo eléctrico que dejó sin iluminación dos torres.
Tras normalizarse el servicio de energía –en la emergencia usaron hasta una escoba para prensar un switch–, la Liga terminó de enfriar los últimos arrestos morados, intentando controlar el balón lejos de su área.
Las opciones para los visitantes se esfumaron al salir expulsado Duarte, en el minuto final, tras derribar a Van der Putten en el borde del área.
Fue un choque trabado, friccionado, que se definía para cualquiera que rompiera, en un parpadeo, el cerco defensivo.
Saprissa se vio medroso.
Su chispa ofensiva estuvo contenida.
Se enconchó.
Esperó, frenó y cortó los avances manudos.
Quizá especuló con el empate, el alargue o los penales.
Una apuesta riesgosa en instancias como estas.
Aún así tuvo dos opciones claras al final del primer tiempo repelidas por el arquero erizo Washington Ortega.
En el segundo tramo, Alajuela buscó más intensamente el área morada.
Y en el minuto 91´, d3scuento, tuvo premio a su perseverancia.
En un entrevero en el área, Aarón Salazar, casi cayendo, filtró el balón a Joel Campbell, recién ingresado, quien remató de seguido.
Alvarado rechazó pero apareció Bran, se elevó y clavó fuerte de cabezazo al ángulo derecho.
Imposible para Alvarado.
La locura estalló en el estadio rojinegro.
Cuando se disponían a reiniciar el juego, se apagaron dos torres de iluminación, lo cual forzó al árbitro a suspender el cotejo.
Los equipos se fueron a los camerinos.
Tras la reanudación, Alajuelense procuró controlar más el balón en los últimos instantes, lejos de su zona defensiva, para no llevarse ninguna sorpresa.
Saprissa lo intentó vanamente con pases largos globeados.
A los cuatro minutos exactos de reposición y, tras la expulsión de Duarte, el árbitro decretó el fin del partido.
Acababa una larga sequía de clásicos sin triunfo para los manudos.
Resta el capítulo final ante Herediano con la ansiada 31 en la mira.
Lo que se viene será bravo
Oscar Macho Ramírez prevé una serie finalísima de alto voltaje.
“Herediano es un equipo que en los dos últimos campeonatos fue el mejor y será difícil”, advirtió el timonel rojinegro que asumió hace apenas un mes, el Viernes Santo 18 de abril, tras la abrupta salida de Alexandre Guimaraes.
“Será una batalla difícil, pero estamos apuntando a eso”, ratificó.
“No crean que uno es un mago ni nada por el estilo, es solo que los muchachos entiendan y aplicarlo. Hasta sencillo suena”, puntualizó
“Llegar a la Gran Final, lo hemos manejado paso a paso. Hoy era el más importante, porque era optar por ir a la Gran Final”, remarcó.
“Hay una evolución de los muchachos, me encantó verlos conectados con la gente”, exaltó.
“Tuvimos dominio, pero nos faltaba punch“, admitió.
“Los muchachos están bien, contentos, pero no satisfechos”, reconoció de cara a la serie final.
Y felicitó a Saprissa. “Fue un equipo muy digno y nos costó. También a Paulo, todos los que estamos en esto sabemos lo que es perder, de parte mía y de Alajuelense felicitarlos por lo dignos que fueron”.
