Edgar Fonseca, editor/Foto Familiares de la víctima, Público.es
La turista española Arantxa López Gutiérrez, de 31 años, muerta el sábado mientras trotaba en un sendero cerca de su hotel en Barra del Tortuguero, habría tenido una conversación con el supuesto homicida la noche anterior, cita el sitio Público.es de Madrid, con base en reconstrucción investígativa.
Según la reconstrucción preliminar de los hechos, “aparentemente” la víctima y el sospechoso habían tenido una “conversación” la noche anterior, consigna el sitio que le ha dado seguimiento al caso.
Arantxa, que llevaba en el país desde el 1 de agosto como parte de un grupo turístico había quedado en verse el sábado por la mañana con una conocida en la piscina del hotel, y así lo hizo, a las 6.40, pero posteriormente decidió caminar hacia la playa sola. Su cuerpo fue encontrado junto a un sendero una hora más tarde.
Tanto el caso de esta turista española, como el de la joven mexicana, María Trinidad Matus de 25 años, muerta el domingo en playa Carmen, Cóbano, Puntarenas, generaron conmoción pública.
Matus llegó al país el 26 de julio en lo que era un plan de viajes alrededor del mundo sola, según apuntó en la red Instagram.
Este martes se dio una cita de autoridades de diferentes instituciones para analizar medidas de protección en zonas de alto tráfico turístico.
El ministro de Seguridad, Michael Soto, confirmó el encuentro con autoridades del Instituto Costarricense de Turismo y de la Cámara Nacional de Turismo y otras cámaras de turismo “para coordinar acciones en conjunto y fortalecer la seguridad para las turistas que visitan nuestro país. Analizan estrategias informativas de prevención”.
Supuesto móvil sexual
María Trinidad Matus, Instagram
Los investigadores costarricenses –detalla Público.es– apuntan al móvil sexual como causa del asesinato, perpetrado asesinato de la española de el sábado pasado en las inmediaciones del hotel en el que se alojaba en Tortuguero .
Así lo expuso en rueda de prensa el director general del Organismo de Investigación Judicial (OIJ) del país, Walter Espinoza, aunque matizó que por el momento se trata de una conclusión preliminar que debe confirmarse con pruebas periciales, añade el medio español.
Según explicó, este domingo se practicó la autopsia al cuerpo de la joven y se obtuvieron muestras de “fluido biológico” que van a cotejarse con las muestras de sangre obtenidas del sospechoso detenido. El cuerpo de la joven fue encontrado por empleados del hotel, con las ropas inferiores y exteriores “corridas”, junto a un sendero.
El sospechoso –menciona el sitio– es un ciudadano nicaragüense de 33 años, llamado de apellido Díaz y empleado en otro hotel de la zona, pero el responsable de la OIJ reconoció que el detenido no tiene documentación, ni de Costa Rica ni de Nicaragua, de manera que tendrán que contrastar la información con la Policía de este país. El sospechoso permanecerá retenido aunque el tribunal no decrete para él prisión preventiva porque está indocumentado y supuestamente en situación irregular. Ahora, la prueba biológica será fundamental para confirmar su implicación. Díaz fue dejado en libertad por falta de pruebas en contra suya, hasta el momento
Díaz –agrega Público.es– fue detenido a raíz de las entrevistas que los investigadores hicieron en el lugar del crimen, que permitieron situarle en el lugar en ese momento, teniendo en cuenta también que el móvil fue aparentemente sexual. “Es una zona muy pequeña donde prácticamente todas las personas se conocen y hacer entrevistas es relativamente sencillo”, señaló el responsable.
Los familiares de la joven se desplazaron a Costa Rica -según fuentes cercanas al grupo, todos han sido trasladados a San José-. Según Espinoza, las autoridades están en contacto con la embajada y el consulado de España para cooperar en lo necesario y, previsiblemente, autorizar el traslado del cuerpo a España, consigna Público.es.
Ver: Público.es, Madrid