Los cárteles de la droga colombianos y los grupos rebeldes están matando a personas que no cumplen con las medidas de encierro en respuesta a la pandemia del coronavirus, advirtió Human Rights Watch (HRW).

El informe encontró que, además de la cuarentena impuesta por el gobierno, los grupos armados en varias partes del país han decidido hacer cumplir las reglas en un supuesto intento por prevenir la propagación del virus.

Los grupos, que incluyen el Ejército Comunista de Liberación Nacional (ELN), las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) y el grupo paramilitar de Derecha Bloque Héroes de Castaño y Autodefensas Gaitanistas de Colombia(AGC), están utilizando métodos como los chats de Whatsapp y panfletos para advertir a las personas que están operando en el área.

Al menos ocho civiles han sido asesinados hasta ahora como parte de su represión, mientras que muchos más han sido amenazados o atacados por no seguir las reglas. En consecuencia, HRW ha pedido al presidente Iván Duque que haga más para proteger a las personas contra tal vigilancia.

“Los “castigos” draconianos impuestos por los grupos armados para evitar la propagación de Covid-19 significa que las personas en comunidades remotas y empobrecidas en Colombia corren el riesgo de ser atacadas e incluso asesinadas si dejan sus hogares”, dijo el director de HRW en Estados Unidos, José Miguel Vivanco.

Grupos armados amenazan con imponer brutalmente medidas contra covid-19 SEMANA.COM

“El gobierno debe intensificar urgentemente sus esfuerzos para proteger a estas comunidades, asegurando que tengan alimentos y agua adecuados, y proteger su salud de los efectos de Covid-19 “, continuó.

Duque declaró estado de emergencia en marzo, y Colombia ha estado en encierro de diversa gravedad desde entonces. Aquellos que violan las medidas generalmente están sujetos a una multa de 950,000 pesos ($250), sin embargo, sigue habiendo una desobediencia generalizada ya que muchos que viven en la pobreza se ven obligados a ir a trabajar independientemente. La cuarentena está programada para finalizar el 1 de agosto, y bien puede extenderse nuevamente.

Los operativos de los grupos terroristas en todo el país subrayan el fracaso de acuerdo de paz del presidente Juan Manuel Santos con las FARC. Santos forzó pasar el acuerdo en el Congreso del país en 2016 a pesar de su rechazo en un referéndum nacional y ganó el Premio Nobel de la Paz por ello.

Según el acuerdo, los líderes rebeldes de alto rango recibieron amnistía o penas de prisión ligeras a cambio del grupo que dejara las armas. Sin embargo, desde que se aprobó el acuerdo, otros grupos marxistas como el Ejército de Liberación Nacional han llenado el vacío, llevando a cabo múltiples ataques terroristas en todo el país y ganando su dinero en el comercio de cocaína. Los principales líderes de las FARC también han desaparecido en la selva colombiana, pidiendo más violencia.

Al igual que muchas partes de América del Sur, Colombia se está acercando al pico de la pandemia. Hasta el jueves, las autoridades médicas habían confirmado más de 182,000 casos del virus y 6,288 muertes, y el número de casos aumentó en un promedio de 5,000 por día. Eso lo ubica muy por detrás de algunos de sus vecinos, incluidos Perú y Chile, los cuales han registrado más de 300,000 casos, mientras que Brasil ya sobrepasó los dos millones de casos confirmados.